domingo, 5 de noviembre de 2017

COMPLICES

Sois..., quienes sin ser, genéticamente afines a mi,
ni estando en momentos cruciales de mi vida,
ni siendo las personas a quien se lo debo todo…
me entendéis!

A vosotros…,
que no tuvisteis miedo al contagio…,
quienes leéis el ánimo en mi silencio…,
quienes sin buscar, encuentro,
quienes notáis que tras una fingida sonrisa, se esconde un “hola” diferente,
quienes conocéis la canción de mi corazón,
pudiéndola cantar, cuando en ocasiones se me olvida la letra.

A vosotros…,
que os encontré en ese punto caprichoso del camino hacia la vida,
sabedores de un camino duro, angosto, con carencias.
No preguntasteis, ni juzgasteis.

¡Fuisteis valientes!
Activándose una retroalimentación, un ”feedback”,
indecible, algo mágico…,
entendisteis que el perder el aliento es humano,
aunque no, perder el tiempo.

Y al encontrarme con vuestro silencio…,
conversamos largo tiempo.
Y en una cómplice mirada se entreleía un estamos, 
estaremos juntos.

D.M.